martes, 2 de septiembre de 2008

Productores lácteos no unifican el valor que debería tener el precio de la leche

El País.- Los tamberos no se terminan de poner de acuerdo sobre el precio del litro de leche que se está discutiendo a nivel nacional, una de las primeras “fracturas” del ruralismo después de la crisis agropecuaria. Para algunos debería estar en 1,15 pesos, mientras que otro sector considera que el piso tiene que ubicarse entre 1,25 y 1,30 pesos. “Si se fija en 1,15 pesos el litro con un mecanismo de actualización periódica, el 70 por ciento de los productores aproximadamente estaría cubierto”, afirmó una fuente láctea provincial y agregó que significaría entre 37 y 38 centavos de dólar, “un valor pocas veces logrado”.
En cambio, los productores más “duros” entienden que para tener rentabilidad se requiere, como mínimo 1,25 pesos. “Los costos se incrementaron considerablemente en los últimos meses y cada vez es menos rentable y atractiva la actividad”, sostuvo un dirigente gremial. En la actualidad, el monto es de 1,05 pesos gracias a un subsidio de 10 centavos aportado por el gobierno nacional.
La postura de la Cámara de Productores Lecheros de Córdoba es que se necesita “un marco regulatorio, no intervensionista; un ordenamiento para poder planificar a mediano y largo plazo”, lo cual es compartido por la totalidad de la cadena.
Lo cierto es que no tener una postura unificada genera roces a nivel institucional y se trasladan a las reuniones del Grupo Lácteo, en cuyos encuentros los funcionarios nacionales no están dispuestos a autorizar actualizaciones importantes por temor de que se traslade al mercado interno. En ese sentido, el secretario de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentos (SAGPyA), Carlos Cheppi, convocó para el jueves a los miembros del Grupo para que gobierno, tamberos y la industria avancen en las tratativas para fijar políticas para el sector. De la reunión está previsto que participen también funcionarios de las provincias de Buenos Aires, Córdoba, Entre Ríos y Santa Fe.
Importación
La situación creada en las explotaciones tamberas, consecuencia de la falta de rentabilidad y de políticas de estímulo para el crecimiento sectorial, llevará a que el país “termine importando leche, ya que quedarse quieto en la producción es retroceder”. Así lo expresó de manera contundente Jorge Chemes, el coordinador del área de lechería de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), quien participó hasta ahora de todas las reuniones técnicas para evaluar la crisis del tambo, a las que convocó el secretario de Agricultura, Carlos Cheppi. En su opinión, la situación del sector lechero “está muy complicada y lamentablemente da la sensación de que se agravará, ya que no veo las perspectivas de mejora que necesitamos inmediatamente en los precios”, sentenció. Agregó que “tampoco” se avizora la posibilidad de algún sistema de compensación “o algo que alivie la situación financiera” del productor lechero. Asimismo y en declaraciones televisivas, sostuvo: “A los malestares actuales hay que sumarle condiciones climáticas que azotan desde fines del año pasado. La sequía es prolongada y muy fuerte, con lo cual cerramos un paquete muy difícil de revertir en forma inmediata y que también puede llegar a complicar la producción del año próximo”, vaticinó.
Consultado respecto de las proyecciones oficiales, que dan cuenta de una productividad media para este año del orden de los 10.000 millones de litros de leche, no vaciló en afirmar: “La sensación que tenemos en el campo nos da otros parámetros, ya que siguen achicándose los rodeos y continúan cerrando tambos”. “Nuestra lectura es que hay menos producción”, resumió.
Chemes puso de relieve que: “No hay dudas que a este paso vamos a terminar importando leche. El consumo aumenta notablemente, cada año se incorporan mas consumidores y, entonces, el incremento del consumo es mayor que la producción y el solo hecho de quedarse quieto en la producción es retroceder”, sostuvo.
De cara a ese escenario, agravado por el envío a faena de vacas lecheras, casi a diario, dijo: “Con más razón considero que estamos cayendo en stock con la carne y estamos cayendo en producción con la leche”. En esa línea, trazó una proyección poco alentadora al afirmar: “Si no damos una vuelta de timón urgente y no abrimos las exportaciones para los lácteos y la carne, esto no va a mejorar. En el caso de los lácteos habría que hacerlo para que las industrias puedan generar mayor margen de rentabilidad y eso se pueda transmitir al tambero”. “Si esto no se hace, creo que la situación se agravará notablemente”, consideró.
En su opinión, el desembarco de Cheppi en la Secretaría de Agricultura “evidencia algunos cambios”, debido a que el funcionario “demostró una excelente voluntad para dialogar”, así como que “estuvo de acuerdo” en muchos de los planteos que elevaron los productores. No obstante, puso de relieve que en la medida en que no haya voluntad política o decisión para modificar la crisis, “por más que tengamos la mejor persona a cargo de una cartera va a ser difícil llevarlo adelante”. Chemes se esperanzó en que: “Este secretario pueda tener mayor poder de decisión -que las de otras gestiones- y, si es así vamos a poder mejorar algo. Pero lo veremos con el tiempo, ya que hemos tenido unas pocas reuniones y sólo los hechos concretos definirán esta cuestión”, concluyó.
Fuente: La Mañana

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