miércoles, 16 de julio de 2008

Suman más inspectores para controlar boliches

Río Cuarto.- El polémico funcionamiento de los boliches de la ciudad se actualizó en las últimas horas debido a los disturbios ocurridos el último fin de semana en uno de esos locales, hecho que derivó en la detención de varios jóvenes.
Ahora, por el creciente descontrol de la actividad, la Municipalidad anunció que incorporará a nuevos inspectores para asegurar el cumplimiento de las ordenanzas vigentes en las confiterías nocturnas. La Policía reclamó que se haga respetar el horario de cierre de esos locales, tal como lo señala la ordenanza que fija que deben culminar la actividad a las 5. Sin embargo, la realidad muestra hoy que cada propietario cierra al horario que más le conviene.
El secretario de Gobierno del municipio, Claudio Miranda, anticipó que ya instruyó a sus colaboradores para sumar un nuevo equipo de inspectores para mejorar los controles nocturnos.
“Es un tema sobre el cual ya veníamos trabajando y ahora está la decisión de incorporar a un grupo de agentes para asegurar una labor eficiente en este tipo de locales”, dijo el funcionario.
En el Ejecutivo municipal y en el Ente Descentralizado de Control (EDECOM) se había admitido como una falencia la falta de agentes controladores de la movida nocturna de la ciudad. Así se lo habían hecho saber también los dueños de pubs y confiterías, quienes avisaron que ellos no pueden ni quieren tener la exclusiva responsabilidad de controlar.
En ese marco, el gobierno avanzará en pocos días más, en la incorporación de casi una decena de nuevos inspectores, quienes previa capacitación, serán enviados a reforzar las guardias nocturnas en los fines de semana, según anticipó Miranda a Radio Ciudad.
El disparador tuvo lugar el fin de semana pasado cuando frente a un pub del centro se produjo un hecho de violencia y disturbios provocados por seis jóvenes que salían del lugar en estado de ebriedad. El episodio, tuvo lugar a las 8 del domingo y motivó un fuerte despliegue policial. Por eso, las autoridades de la Unidad Departamental pidieron una reunión al gobierno municipal para demandarles que se deberían limitar los horarios de las confiterías bailables, a los fines de que se cierren sus puertas a las 5, que se controle la capacidad de ingreso de cada local, como así también, la permanencia de menores de 16 años.
Para la Policía debe haber mucha coordinación, pues de esa manera podrían sincronizar mejor las respuestas necesarias a las salidas de las discotecas, lo cual evitaría los problemas que se suscitan invariablemente por la aglomeración de muchos jóvenes.
Según indicaron los uniformados, cuando antes los bares cerraban todos juntos a la misma hora, los operativos de control eran más efectivos porque en apenas una hora se desarticulaban los posibles focos de conflictos.
Ahora -dicen- ello no sucede porque se perdió el nivel de control y cada local cierra a cualquier hora, sin respetar las normativas vigentes.
Fuente: La Mañana

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