EE.UU.- Situado en medio de una arboleda de robles nativos del Hyatt Regency Hill Country Resort, el spa Windflower es a la vez un tributo histórico a los pioneros que se establecieron en Hill Country en el centro de Texas y, a la vez, una parte del paraíso campestre moderno.
Windflower presenta una experiencia spa diferente a cualquier otra en un ambiente que captura el encanto y atractivo de una casa del siglo XIX. El lugar ofrece tratamientos personalizados de 50 a 80 minutos en 21 salas. Dieciséis de ellas se usan para masajes y tratamientos más convencionales y una es para parejas, mientras que las cinco restantes están diseñadas para tratamientos “húmedos”, como baños terapéuticos, envolturas corporales y duchas Vichy.
“Cuando la gente visita un spa busca una experiencia única que los conecte con el lugar. Hemos creado eso desde una perspectiva arquitectónica así como con nuestros tratamientos exclusivos”, comentó Michelle Carpenter, directora del Windflower Spa.
La hidroterapia, aromaterapia y otros tratamientos utilizan hierbas naturales y elementos botánicos. Durante todos los tratamientos exóticos y revitalizantes, una sensación de tranquilidad a la antigua impregna cada sala. Los muebles rebordeados con cubiertas de granito verde musgo mantienen el ambiente hogareño y natural, mientras que los botiquines anticuados y los edredones hechos a mano agregan color y calidez. El ambiente de meditación y relajación continúa al aire libre en Windflower, ofreciendo una piscina aislada con una longitud de 20 metros y un patio con una fuente protegida por sombra para meditar con tranquilidad.
Atractivo histórico, servicios modernos
Acercarse al spa Windflower, desde el hotel es caminar hacia el pasado por una vereda en el campo. El antiguo molino de viento Star Windmill gira lentamente con la brisa, nos lleva a otro tiempo, a otro lugar. El aroma de las hierbas y rosas antiguas del jardín establece la atmósfera. La "casa hacienda" que sirve de entrada al spa, con su construcción clásica al estilo Hill Country, saluda a los huéspedes desde su tradicional portal. En cada detalle, la casa hacienda asemeja a una de las fincas del siglo XIX que en algún tiempo estuvieron esparcidas en Hill Country, en las afueras de San Antonio.
“Estas estructuras fueron construidas por colonizadores europeos quienes utilizaban cualquier piedra y madera nativa que tuvieran a su alcance para levantar sus casas, actualmente se consideran obras maestras por sus líneas simples, sus cimientos sólidos y su verdadera funcionalidad”, explicó Tim Blonkvist, arquitecto de la compañía Overland Partners con sede en San Antonio que construyera los edificios de Windflower. “Estas casas antiguas fueron nuestra inspiración para diseñar las instalaciones de este spa". Al conservar las tradiciones arquitectónicas del área, la “hacienda” Windflower incorpora piedras nativas, vigas de madera auténtica, madera áspera talada rescatada de estructuras abandonadas y tejado de metal. La gran chimenea, mesas de madera para exhibición y ebanistería hecha a mano muestran detalles de una tienda rural del antiguo Texas. Por el contrario, los anaqueles están llenos de productos de spa contemporáneos y sofisticados, todos para ayudar al cliente a lograr un feliz equilibrio de mente, cuerpo y espíritu.
Justo afuera del área de venta hay un salón de belleza con servicio completo con dos estaciones para arreglo del cabello, tres estaciones de pedicure y tres de manicure. Los huéspedes pueden mirar la arquitectura paisajista; un tratamiento de belleza dentro de la naturaleza.
Las áreas de vestidores de hombres y mujeres cuentan con comodidades como saunas, baños de vapor, tinas de hidromasaje rodeados de muros con mosaicos de azulejo, que resplandecen en un suave color verde mar y toques de oro. Los casilleros de madera creados a medida, también de pino antiguo, montados sobre una combinación de alfombras diseñadas exclusivamente para el hotel y cubiertas de pizarra en tonos tierra, proyectan la atención al detalle que recibirán los visitantes del spa.
Gino Caliendo gerente general del centro vacacional comenta que a los huéspedes les gusta el spa. “Da un toque final a lo que hace que Hyatt Regency Hill Country Resort sea un destino completo y memorable con golf, excelentes restaurantes y mucho espacio para reuniones. Siempre se nos ha conocido por ser una fantástica huida familiar y Windflower nos da un escape para adultos”. El spa está situado en el extremo norte del edificio principal del Hyatt Regency Hill Country Resort, a sólo 20 minutos del Aeropuerto Internacional y del centro de San Antonio.
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