Córdoba.- Atendiendo a la gran necesidad de financiamiento que posee la mayoría de los sectores económicos, sobre todo los más pequeños, para poder desarrollarse, un grupo de nueve mutuales del interior del país planea poner en marcha a partir del año próximo una Caja de Crédito Cooperativo.
El primer paso se dio con la firma de un convenio que las entidades suscribieron con el Centro Internacional de Apoyo al Crédito Cooperativo y a través del cual se conformó una junta promotora para la creación de la financiera. Es importante mencionar que entre las mutuales se encuentran dos oriundas de Córdoba: Sancor y la Cooperativa de Agricultores, Productores y Consumidores (CAPYC), que integran el Grupo Cooperativo Devoto.
Según lo informado a LA MAÑANA por el titular del Grupo Cooperativo Devoto, Domingo Benso, la puesta en marcha de esta iniciativa depende primordialmente de que sea aprobada por el Banco Central de la República Argentina (BCRA). Por ello, la primera acción de la junta promotora será presentar el proyecto ante la autoridad crediticia nacional, para su evaluación y posterior aprobación. La propuesta se enmarca en la ley 26.073, que es la que especifica los diversos aspectos que deben observarse para poder crear una caja de crédito.
Benso calculó que, si se cumplen los plazos estimados por los promotores de la iniciativa, seguramente en el transcurso de 2009 la caja de crédito estará en condiciones de comenzar a operar. La idea básicamente es satisfacer la necesidad de financiamiento de los productores rurales y los pequeños comerciantes y empresarios, que son los principales motores de las economías regionales.
En tal sentido, el dirigente valoró el papel que pueden desempeñar en las economías locales las cajas de crédito, ya que podrían convertirse en polea de transmisión del desarrollo de vastas regiones del país. Si bien admitió que para la experiencia de nuestro país no es fácil ocupar un lugar tan sensible en el proceso económico, consideró que este tipo de entidades tienen los elementos formales para respaldar el desarrollo de las distintas zonas productivas.
Es válido decir al respecto que la necesidad de mayor financiamiento es uno de los principales reclamos que desde hace tiempo vienen formulando las diversas asociaciones, cámaras y federaciones empresariales, sobre todo las que agrupan a los sectores más pequeños; y por eso la iniciativa de lanzar una entidad financiera seguramente será tomada con beneplácito por la mayoría de los actores económicos.
Apoyo internacional
Un aspecto importante a remarcar es que la propuesta se realiza con el aval del Centro Internacional de Apoyo al Crédito Cooperativo, una institución ligada a la comunidad italiana que trabaja por el afianzamiento de los lazos económicos entre el país europeo y América latina.
La idea de una caja cooperativa fue esbozada hace un año por Benso luego de un viaje a Brescia, donde tiene su sede central la Cassa Padana, la entidad crediticia italiana que promueve esta iniciativa. En aquel momento, Benso firmó un convenio de colaboración entre el Grupo Cooperativo Devoto, a través de la Sociedad Cosmopolita de Socorros Mutuos, y Cassa Padana para trabajar en la creación de una Caja de Crédito Regional.
Cassa Padana posee una larga trayectoria en la actividad crediticia, funciona en seis provincias italianas y maneja una cartera de depósitos que ronda los mil millones de euros.
El proyecto de la casa de crédito italiana para Latinoamérica apunta a promover el acceso a la financiación de pequeños campesinos, comunidades aborígenes y otros sectores marginales de la población latinoamericana, para sostener emprendimientos productivos especialmente relacionados con la explotación de la tierra.
Fuente: La Mañana
martes, 2 de septiembre de 2008
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