Sin hacienda: primera señal fuerte del paro

El País.-El paro comercial del agro inició su cuarta jornada sin estridencia, pero con uno de sus primeros objetivos logrados: impedir el normal ingreso de hacienda en el Mercado de Liniers y el resto de las plazas concentradoras. En Córdoba, por caso, no hubo descarga de animales en el predio que el Mercado Concentrador de Hacienda (Mercoha) posee en Ferreyra.
“Todas las casas consignatarias han adherido al paro, ya que acuerdan con sus fundamentos. Nadie ha vendido cereales ni se ha movido hacienda”, señaló Héctor Novaira, socio de la firma Ganados SA, que participa de los remates junto con Consignaciones Córdoba.
La habitual subasta de los lunes podría realizarse recién el próximo jueves, aunque dependerá del traslado de animales del miércoles, el último día de la protesta. De todos modos, los frigoríficos cuentan con stock para abastecer sin problemas al mercado durante dos semanas.
Al cierre de esta edición tampoco se había consignado el ingreso de ganado en Liniers, pese a que habían quedado alrededor de 700 guías de tránsito como remanentes del viernes. “No sé cómo responderán los productores, pero tengo la impresión de que no habrá animales”, indicó en la tarde de ayer un representante de la firma Sáenz Valiente, Bullrich y Cía.
En cuanto al nivel de participación en la protesta, se espera que comienza a aumentar desde hoy, con distintos actos y asambleas. En Córdoba está previsto un acto para mañana a las 11 en Altos Fierro, convocado por la Mesa de Enlace local.
Anuncios. Durante el fin de semana, varios funcionarios ratificaron que el Gobierno anunciará un paquete de medidas para el sector, que se conocería cuando finalice la medida de fuerza del agro. Se especula con la posibilidad de que la Presidenta lo lance durante el acto de apertura de un encuentro sobre agricultura familiar, que se realizará el jueves venidero en la localidad bonaerense de Moreno.
Según publicó ayer Página 12, el plan incluye subsidios por 530 millones de pesos, que se distribuirían de la siguiente manera: 130 millones para ganado y trigo por pérdidas a raíz de la sequía; 240 millones para economías regionales; y 160 millones para un precio sostén en la leche.
En este último caso, implicaría que las industrias aseguren una base de un peso, mientras que el Estado completaría para llegar a 1,047 peso. En este punto habría intervenido el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, para fijar las bases de un nuevo acuerdo de precios con las empresas (en especial, para la leche en saché) a cambio de liberar 15 mil toneladas de leche en polvo para exportar antes de que siga cayendo el precio internacional de ese producto.
También contemplaría subsidios a la tasa de interés de los créditos del Banco Nación para el sector y la formación de una mesa de negociación para acordar una nueva política ganadera, además de compensaciones para incentivar el engorde de terneros Holando Argentino y el reparto por licitación de la cuota Hilton (cortes de carne bovina al mercado europeo).
Otro punto fuerte son las retenciones a los cereales. En este punto, el Gobierno analizaría bajar el porcentaje que actualmente paga el trigo (28 por ciento) y fijaría un umbral productivo a partir del cual, de ser superado, esas toneladas de maíz o trigo no pagarían retenciones.
Al respecto, el vicepresidente de Federación Agraria Argentina, Pablo Orsolini, aseguró que los dirigentes de la Mesa de Enlace están “abiertos al diálogo”, pero que “hay que ver cuál es el paquete de medidas” para levantar eventualmente el paro.
Fuente: La Voz